Manhattan & Sushi 17: Un trozo de luz

La tarde se volvió azul, y entre las ventanas de la sala de espera entraba pequeños haces de luz del fluorescente donde se podía leer... "Visite nuestro Bar".
Chusa y Marco descansaban apoyados el uno en el otro, en la mesita auxiliar varias cervezas, y dos bolsas arrugadas de snack de patata.
- Joder... nos hemos tomado tres cervezas cada uno, y dos bolsas de patatas grasientas que quedarán de por vida en mis muslos.- dice Chusa al aire condensado de un verano que ya iba tocando su fin.
- Hostia! es verdad... AAAAAAAhhhhhhhh!!! mi cuerpo es invadido por hidrocarburos.... .- grita Marco como si fuese poseído por el demonio.
- Jajajajajajaja... será hidratos de carbono... cenutrio.
- Sí eso, tres días en el gym, tengo una reputación que mantener, y esas no se mantienen solas....- se pone de pie y sus manos recorren su contorno abdominal.- La vida de la Top model es muy dura, chica. ¡Ay, amor, no me dejes sufrir!
- ¡Qué teatrero eres, mariconazo! Ven dame un abrazo que estoy desahuciada emocionalmente...
Se fusionan en un largo y entrañable abrazo.
En ese momento entramos Bibi y yo agarradas del brazo.
- Chicas, ya estamos aquí.
Corren al encuentro, yo cansada, me siento en una de las sillas que mira la vida pasar...
- Reinas, no os podéis imaginar lo que ha pasado en tan solo dos horas y media, vuestra querida amiga, Chusa... .- le interrumpe tapándole la boca con la mano.
- Lo primero de todo, dinos como estás.- interesada, Chusa.- que nos hemos enterado que estás embarazada...
- ¿Cómo? ¿Quién os lo dijo?
- La petarda de Angus... llegaron ella y su novio El antiguo...
- Feliciano, ¿está aquí?.- me incorporé ante la sorpresa.
- Bueno, estar, estar, lo que estar no está... Estaba, ahora duerme, el pobre.- Marco se contiene la risa.-
- A ver, Marco, joder, explícate...
- Bueno... siéntate en el sofá ese de ahí, que estarás más cómoda, porque vienen curvas... ¿Quieres que te traiga algo? ¿Bebida, Comida, Arsénico?
- NO, cuenta.
- Bien, la extraña pareja ha venido para preguntar como estaba Lola, porque supuestamente, Ursula, la del bar, trabaja para ella...
Hemos tenido una pequeña trifulca, al decirle que tu estabas donando sangre para Lola, lo ha soltado la muy perra.
- Ya... no quiero saber más, Marco... ¿se han ido?
- Ahora viene lo bueno, querida, al soltar la bomba a traición de que estas embarazada, Tu amiguísima Chusa, le ha lanzado el Manolo a la cabeza...
- ¡¡¿Quééééééééééé?!!.- suelto la bebida isotónica que me habían dado en la sala de extracción junto con el sandwich de pavo.
Un temblor recorrió mi cuerpo, como si la sangre que me habían extraído no hubiera sido repuesta. Un gélido respiro cristalizó mis pulmones, y en ese momento supe que Feliciano pasó a mejor vida, ya no dentro de mi vida, sino en el exterior de mi corazón.
-Susa, amor, ¿Qué te pasa?.- le acarició Bibi.
-Nada, espero que la extraña pareja sea feliz, yo paso ya de esconderme... y a vosotras.- me giro a Chusa y Marco.- os quiero decir que voy a abortar no quiero tener el bebé de una persona que juega con mis sentimientos, que no me quiere.
Rompí a llorar, y las lágrimas hicieron resquebrajar mi interior...
- Cariñooo... todos te apoyamos... lo que decidas estará bien.- Sentenció Marco.
- Susa, pero hay algo que debes saber, después de interrogar la policía a Chusa y de hacer todo el papeleo que conlleva un delito, me fui a la cafetería a por tilas porque nos iba a dar un jamacuco... y cuál es mi sorpresa...
- Marco, no tiene importancia, ya se lo cuentas.- le interrumpe haciendo un ademán hacia la puerta.

Apareció Angus seria, con un informe médico en la mano, parecía que por su cuerpo había pasado cincuenta años...
- Joder, si parece la ama de llaves de Rebeca, me da yuyu....- susurra Marco.
Chusa descalza y coja de un pie, se levanta junto a Bibi, como flanqueándome para protegerme y Marco me abrazaba fuerte...
- No eres bienvenida, vete, Angus, no quieras acabar como tu novio en camilla.- severa, Chusa.
- ¿A qué vienes? No queremos a que remuevas más mierdas, por respeto a nuestras amigas, te ruego que te vayas.- le señala la puerta Bibi.
- Vale. Me iré... pero Susa, debes saber que necesito hablar contigo en privado. Feliciano se encuentra ingresado y está estable. Es una cuestión que nos afecta a las dos, únicamente a las dos.
Sus palabras cortaban mis entrañas como afiladas navajas, me tapaba los oídos, porque el odio empezaba a apoderarse de mi... Lloraba para ser la dueña de mi silencio.
- ¡Qué te vayas, coño!.- la empuja Chusa.
- Angus, de verdad, no estamos cómodas, además esperamos a los médicos para que nos cuenten cómo está Lola.
- Susa, sé que estás embarazada... y Feliciano también lo sabe. Las dos esperamos un hijo de él... tenemos que hablar.
Me recompuse la miré y le dije:
- Yo no estoy embarazada, he abortado, tú y yo no tenemos nada de que hablar, estábamos unidas por un hombre, como un cordón umbilical, pero lo corté.- las rodillas me temblaban.- por lo tanto no quiero volver a verte nunca más, ¡¡¿entendido?!!. Mi única preocupación es Lola. ¡Largo!,- me senté de nuevo.
- Susa, ¡Por dios!, ¿cómo has podido sacrificar la vida de un bebe del hombre que amas?.- llevándose las manos a la cara, apunto de llorar.
- ¿Pero esta tía es gilipollas, o qué?. Vete de una puta vez o me lío la manta a la cabeza.- Chusa enfadada.- ¡Cómo te atreves a decir lo que tenemos o no tenemos que hacer! ¡y eres una Hijadeputa, por venir a malmeter cuando estamos al borde de la crispación... ! ¿Qué interés tendrás tú en el bebé de Susa? ¿no será que tú no estás embarazada, mala pécora?
- ¡Vete a la mierda! Y búscate un abogado porque te vamos a meter un puro que te vas a enterar.
- Jajajajajaja, el abogado soy yo... y ten cuidado con lo que dices, que se puede volver en tu contra... Hablaremos muy pronto, y ahora vete.
Angus se marchó cabizbaja, cruzándose con los médicos de Lola.
- Buenas, ¿Los familiares de Lola González?
- Sí, somos nosotras... díganos.
- Buenas noticias, la señorita González se encuentra en la unidad de cuidados intensivos, y ha despertado del coma. Se encuentra en estado grave, y la operación ha salido bien.
- Bien, Lolita... eres una superwoman... .- susurré, contenta... pero vacía.
Suena el teléfono de Chusa, corre a contestar.
- Joder, ¿qué quieres?, me has llamado diez veces hoy... estás muy pesada.- grita.- ¡¿Cómo?! ¿Qué estás en la ciudad?, lo que me faltaba... vale. Adiós.
- Chicas, me cagoenlamadrequemeparió, mi hermana Begoña está aquí, viene a quedarse y dice que tiene problemas... como si los demás no, ¿no te jode? qué los podemos cambiar como cromos...


continuer...


Comentarios

  1. Pero bueno ya sabes de la Bego...cuenta, cuentaaa...se pone interesante...

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  2. Me cachís en la mar... más, más madera.Lo que faltaba, ahora viene la Begoña, con la manía que tengo yo a ese nombre, oye. Es que tuve un vecina de pequeña que era más mala que un demoño.

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